El reloj lo guardé en una gaveta, quemé los calendarios, me deshice de los diarios. Ya no quiero contar los días que han pasado, ni los que faltan; de alguna manera sólo tengo un hoy, un aquí, un ahora, que no espera a que decida vivirlos, simplemente pasan a mi vera, volteando la mirada, esperando que sonría y me decida a perseguirlos.
Cambié un estuche de complejos, por otro diferente, vivir sólo hoy es también un riesgo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario